Pasó un año en el gobierno Milei: recesión, desempleo y salarios en picada
Este martes 10 de diciembre se cumple un año desde que Javier Milei asumió como presidente de Argentina. En este período, su gobierno implementó un fuerte ajuste económico que dejó consecuencias visibles en el empleo, los salarios y el consumo. Según un informe del Centro de Economía Política (CEPA), las reformas aplicadas generaron tensiones económicas y sociales que marcan su gestión.
El informe destaca la pérdida de 261 mil puestos de trabajo registrados desde noviembre de 2023 hasta agosto de 2024. Los sectores más afectados fueron la construcción, con 66 mil empleos menos, y la industria manufacturera, que redujo su plantel en 29.600 trabajadores. En contraste, sectores como el agro, la minería y la pesca lograron incrementos marginales en la generación de empleo, aunque insuficientes para contrarrestar las pérdidas generales.
En cuanto a los salarios, la caída del poder adquisitivo se volvió evidente. Los trabajadores privados lograron una recuperación parcial, ubicándose 1,5% por debajo del nivel de noviembre de 2023, mientras que los empleados públicos y los no registrados sufrieron pérdidas significativas, con retrocesos de 16,1% y 20,1%, respectivamente. En promedio, el poder de compra de los salarios bajó un 3,7%, agravando las dificultades para sostener el consumo interno.
La inflación fue otro eje crítico durante este primer año. Tras una devaluación inicial en diciembre de 2023, los precios aumentaron drásticamente, con picos del 25,5% en diciembre y 20,6% en enero. Aunque la inflación mensual se desaceleró a partir de mayo, el impacto acumulado sobre los ingresos familiares profundizó las desigualdades económicas. Además, desde CEPA cuestionaron la metodología utilizada para medir la inflación, afirmando que subestima los incrementos en servicios esenciales y transporte.
De cara a 2025, el panorama no parece alentador. El informe advierte que la falta de dinamismo en los salarios y la caída del consumo seguirán limitando el crecimiento económico. Asimismo, las diferencias entre sectores ganadores, como el agro, y perdedores, como la industria y el comercio, podrían profundizarse, acentuando las desigualdades. Pese a los datos adversos, el gobierno de Milei sostiene que las reformas apuntan a un crecimiento sostenido a largo plazo.