Día Mundial del Parkinson
El Día Mundial del Parkinson se conmemora cada 11 de abril con el objetivo de brindar mayor información sobre esta enfermedad neurodegenerativa e informar cuáles son sus síntomas y señales de alerta, que facilitan alcanzar un diagnóstico temprano. La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece que 1 de cada 100 personas en el mundo padecen esta condición neurológica, considerada una de las más recurrentes luego del Alzheimer.
Desde el Ministerio de Salud del Chaco se informó que se trata de una enfermedad degenerativa, progresiva y crónica que afecta al sistema nervioso. Aparece ante la presencia de varias células dañadas, las cuales dejan de producir dopamina. Esta hormona se encarga de regular la motricidad, por lo que el paciente experimenta diversas dificultades para llevar a cabo acciones que anteriormente resultaban simples.
La enfermedad de Parkinson es un trastorno del cerebro que provoca movimientos involuntarios o incontrolables, como temblores, rigidez y dificultad con el equilibrio y la coordinación. En las etapas iniciales de la enfermedad, el rostro puede tener una expresión leve o nula. Es posible que los brazos no de balanceen cuando una persona camina. El habla puede volverse suave e incomprensible. Los síntomas de la enfermedad se agravan a medida que la afección evoluciona.
Esta enfermedad que afecta en promedio a personas de entre 50 y 60 años de edad por tres factores principales:
1-Envejecimiento: el riesgo aumenta después de los 60 años.
2-Genetica: entre el 15 y 20 por ciento de las personas que lo padecen, tienen algún familiar con la misma enfermedad.
3-Entorno: se cree que la exposición a contaminantes, pesticidas y microorganismos del agua en las zonas rurales también podría estar relacionado con la enfermedad.
Los signos y síntomas de la enfermedad de Parkinson:
-Temblores
-Movimientos lentos (bradicinesia)
-Rigidez muscular
-Deterioro de la postura y el equilibrio
-Pérdida de los movimientos automáticos
-Cambios en el habla
-Cambios en la escritura
Finalmente, desde la cartera sanitaria se concluye: “No tiene cura, aunque los medicamentos pueden mejorar notablemente los síntomas”.