Dujovne y su equipo ya están en Estados Unidos para arrancar la negociación con el FMI
Un equipo económico enviado a los Estados Unidos por el Gobierno nacional llegará esta mañana a Washington, con el objetivo de conseguir un crédito de entre USD 20.000 y USD 30.000 millones del Fondo Monetario Internacional. Partiendo desde Ezeiza durante la noche del martes, y luego de una escala previa en Atlanta, el ministro de Hacienda Nicolás Dujovne y su delegación arribarán en las próximas horas a la capital norteamericana en las primeras horas del día.
El equipo que escolta a Dujovne está compuesto por su jefe de gabinete, Ariel Sigal, el jefe de asesores de la cartera de Hacienda, Guido Sandleris, y Rodrigo Pena, secretario de Hacienda, entre otros funcionarios. También los acompaña Santiago Bausili, secretario de Finanzas en representación de la cartera de Luis Caputo, y Lucas Llach, vicepresidente del Banco Central.
La clave de la reunión que se realizará hoy en los EEUU gira en torno a las condiciones que los directivos del Fondo plantearán para otorgar el créditoque solicita el gobierno de Mauricio Macri. En principio, las reuniones con el Fondo se darán a lo largo del día, pero también se contempla la posibilidad de que el equipo argentino extienda su estadía hasta el jueves para continuar con las negociaciones.
Las charlas se llevarán a cabo durante la jornada de hoy (único día oficial para la visita del equipo liderado por Dujovne) y del otro lado de la mesa, en representación del FMI, estarían Roberto Cardarelli, jefe de la misión para Argentina y, eventualmente, Alejandro Werner, director del Departamento del Hemisferio Occidental del Fondo. No está claro aún si Christine Lagarde, la directora gerente del Fondo, será parte de alguna de las charlas.
La llegada del equipo liderado por Dujovne va a ser seguida de una visita de un equipo del FMI a la Argentina la semana próxima, del cual aún no se conocen los integrantes.
El menú de opciones disponibles sobre la mesa incluye una línea de crédito flexible, ya que es el tipo de financiamiento más raro que da el Fondo, puesto que está apuntado a países que no enfrentan crisis estructurales, sino que están transitando dificultades temporales. Estas FCL (por sus siglas en inglés ) buscan «alentar a los países a solicitar asistencia antes de enfrentar una crisis total», de acuerdo con el Fondo.
El otorgamiento de una FCL, por lo tanto, sería una señal al mercado de que la situación actual de Argentina no es resultado de faltas profundas en la economía, sino que viene de un contexto internacional que temporalmente es negativo para el país.
Entre los requerimientos posibles por parte del Fondo, durante la rueda de ayer varios analistas apuntaban a ajustes en materia de flexibilidad laboral.